Author(s): American Nurses Association (ANA), translated by Elena Plaza Moreno
Year: 2022
Bibliographic Reference: American Nurses Association. (2022). The Ethical Use of Artificial Intelligence in Nursing Practice. Nursingworld.org. https://www.nursingworld.org/~48f653/globalassets/practiceandpolicy/nursing-excellence/ana-position-statements/the-ethical-use-of-artificial-intelligence-in-nursing-practice_bod-approved-12_20_22.pdf
Categoría asignada: Ética y regulación
Resumen: #
El documento The Ethical Use of Artificial Intelligence in Nursing Practice fue elaborado en 2022 por la American Nurses Association (ANA) con el propósito de guiar a los profesionales de enfermería sobre el uso ético de la inteligencia artificial (IA) en la atención médica. Se centra en cómo la IA puede apoyar el trabajo de las enfermeras sin reemplazar su juicio profesional ni comprometer la relación fundamental entre la enfermera y el paciente.
La IA en el ámbito de la salud comprende diversas tecnologías, desde sistemas de apoyo para la toma de decisiones hasta robots y dispositivos que asisten en la administración de medicamentos. La declaración enfatiza que la IA debe verse como un complemento a las habilidades de las enfermeras, nunca como un sustituto de la experiencia, el juicio crítico o la toma de decisiones clínicas. El documento aborda la importancia de que las enfermeras se mantengan al tanto de los avances en IA y eduquen a los pacientes sobre estos, disipando miedos y mitos relacionados con la tecnología.
La ANA resalta que la incorporación de la IA en la atención sanitaria debe enfocarse en mejorar la calidad del cuidado sin afectar negativamente las interacciones humanas. Por ejemplo, aunque la IA puede automatizar tareas rutinarias como la administración de medicamentos, esto no debe traducirse en una reducción de la interacción física y emocional entre la enfermera y el paciente, ya que este contacto es crucial para el bienestar del paciente.
El documento también aboga por que las enfermeras estén atentas a los riesgos éticos que puede traer la IA, incluyendo el sesgo en los algoritmos que pueden perpetuar desigualdades. Los datos utilizados para entrenar modelos de IA a menudo provienen de sistemas de salud con problemas estructurales de racismo o discriminación, lo que puede influir negativamente en los resultados de la atención si no se corrigen adecuadamente. Por ello, las enfermeras deben jugar un rol activo en asegurar que las tecnologías de IA se implementen de manera equitativa y justa, promoviendo la justicia social y la igualdad en el cuidado de la salud.
En cuanto a los datos y la informática, el documento señala que la proliferación de grandes volúmenes de datos de salud, como los obtenidos de redes sociales y dispositivos de monitoreo personal, plantea desafíos éticos. Los pacientes pueden suponer erróneamente que sus datos están completamente protegidos, pero en muchos casos, estos datos son accesibles y usados por terceros. Las enfermeras tienen la responsabilidad de educar a los pacientes sobre el manejo seguro de sus datos y de promover una mayor transparencia en el uso de información sensible.
El documento de la ANA también subraya la importancia de la regulación. Las enfermeras deben colaborar en la creación de directrices y políticas que aseguren el uso ético de la IA, defendiendo la rendición de cuentas de los desarrolladores y la protección de los derechos de los pacientes. La integración de la IA en la enfermería no solo debe enfocarse en la eficiencia, sino en garantizar que las tecnologías no comprometan los principios éticos fundamentales de la práctica. El análisis y la regulación de la IA deben ser rigurosos para mitigar cualquier daño potencial a los pacientes.
Entre las recomendaciones clave, se enfatiza que las enfermeras deben estar informadas sobre el funcionamiento y limitaciones de la IA, garantizar que las tecnologías implementadas no comprometan la privacidad de los pacientes, y participar activamente en las investigaciones y debates sobre las implicaciones éticas de la IA en la salud. Las enfermeras que ocupan roles de liderazgo en instituciones de salud tienen una responsabilidad adicional para garantizar que la IA se utilice de manera ética y efectiva, y deben establecer mecanismos para monitorear y evaluar su impacto.
En conclusión, la declaración de la ANA destaca que la integración de la IA en la práctica de enfermería debe realizarse de manera cuidadosa, respetando siempre los principios de compasión, confianza y cuidado que son esenciales en la relación enfermera-paciente. Las enfermeras deben liderar los esfuerzos para garantizar que las innovaciones tecnológicas beneficien a los pacientes y no agraven las desigualdades existentes.